A la hora de impulsar un nuevo proyecto o montar una nueva Startup, existen diferentes retos a los que se enfrenta un emprendedor. Podríamos decir que dos de los más complicados es el de validar que la idea de negocio es la adecuada, es decir, que el producto o servicio que pretendemos lanzar al mercado cubre las necesidades del público al que lo dirigimos y por otro lado, conseguir los recursos necesarios para llevarlo a cabo.
Como ya sabrás por otros posts de mi blog, para resolver el primero de los retos existe una metodología llamada Lean Startup que persigue el objetivo de validar tu idea de negocio de una forma rápida y empleando la menor cantidad de recursos posibles, no solo financieros, si no también humanos o tecnológicos entre otros.
Sin embargo, una vez que una Startup ha conseguido validar su producto o servicio mediante una propuesta de valor lo suficientemente atractiva como para atraer un volumen inicial de clientes que lo validen y un producto mínimo viable que permita definir cuales serán las funcionalidades o atributos del producto final, se presenta la necesidad de contar con el capital suficiente para traccionar el proyecto y empezar a dar los siguientes pasos.
En este post, te hablaré sobre los diferentes tipos de financiación para emprendedores y Startups más recurrentes en la actualidad, ¡toma nota que empezamos!
Índice de contenidos
Vocabulario sobre rondas de financiación
Antes de comentarte las diferentes alternativas de financiación para tu Startup, déjame introducirte en el lenguaje del mundo de la inversión con alguno de los conceptos más habituales para que te resulten familiares si te los encuentras a lo largo de este post o lo que es más importante, en tu día a día como emprendedor:
Ronda de inversión: aunque últimamente está muy ligado a un evento, que puede ser tanto público como privado, en el que diferentes emprendedores presentan su proyecto ante potenciales inversores para obtener financiación, lo cierto es que la ronda de inversión hace referencia al proceso en si que una Startup lleva a cabo con el fin de obtener el capital que necesita para desarrollar su modelo de negocio.
Valoración: es un indicador del valor de tu Startup en un momento determinado. Inicialmente l valoración de tu Startup la marca el propio emprendedor, es decir, como emprendedor puedes defender que tu Startup vale un millón de euros porque es lo que prevés facturar en tan solo un año, pero en la realidad la valoración será una especie de acercamiento de posturas entre lo que tu crees que vale tu Startup y lo que los diferentes potenciales inversores creen que vale. Cuando hablamos de valoración, habitualmente nos referimos a dos tipos diferentes:
- Valoración pre-money: es el valor de tu proyecto antes de obtener el dinero que buscas. Por ejemplo: crees que tu Startup vale 1 millón y medio de euros (1,5M€) y buscas 100 mil euros (100K) de inversión, tu Startup tiene una valoración pre-money de 1 millón y medio de euros (1,5M€).
- Valoración post-money: es el valor de tu Startup una vez que ya hayas sumado el dinero que buscas obtener de financiación externa. Por ejemplo: si seguimos con el ejemplo anterior, tu empresa tendrá una valoración post-money de 1 millón seiscientos mil euros (1,6M€) ya que a 1,5M€ que tenías de valoración inicial hay que sumar los 100K que obtendrás en la ronda de financiación.
Dilución: es el porcentaje de participaciones que pierdes de tu empresa cuando realizas una ronda de inversión y das entrada a nuevos socios. Por ejemplo: si tu empresa tiene una valoración pre-money de 1M y das entrada a un socio que aporta 100K, tendrás que darle un 10% de participación en la empresa, por lo tanto, te habrás diluido en un 10% y seguirás conservando el 90% de participaciones de tu Startup.
Due Diligence: es un proceso de investigación y análisis que se realiza como parte de las negociaciones entre emprendedor e inversor para establecer un valor justo de la Startup, aunque habitualmente este proceso se realiza solamente para rondas de inversión de grandes dimensiones y cuando la Startup ya se encuentra en una fase más avanzada y por lo tanto, hay una serie de activos y una cuenta de resultados que pueden valorarse y auditarse.
Seed: es la traducción literal de semilla en inglés, por lo tanto, cuando hablamos de fase seed nos referimos a una Startup en una fase muy incipiente y que todavía está dando sus primeros pasos.
Growth: en este caso es la traducción de crecimiento al inglés, por lo tanto, cuando hablamos de fases growth nos estamos refiriendo a fases de crecimiento de la Startup que llevan asociadas unas mayores necesidades de inversión.
Exit: ¡congratulations! Has vendido tu Startup.
Fuentes de financiación para emprendedores
Ahora que ya conoces los principales términos del vocabulario inversionista, lo primero que debes saber es que existen diferentes formas de financiación para un proyecto emprendedor o una Startup. Sin meternos en profundidad en complejas clasificaciones, podríamos agrupar estas formas de financiarse en 4 grandes bloques:
Financiación propia: son los recursos económicos que el propio emprendedor es capaz de aportar para llevar a cabo el desarrollo de su proyecto. Por norma general los recursos propios suelen ser limitados y por ello se recurre a fuentes de financiación ajena como las que indicamos a continuación.
Financiación a fondo perdido: lo que habitualmente equivale a subvenciones de carácter público, procedentes del Estado, Comunidades Autónomas, Fondo Social Europeo, Ayuntamientos, etc. Se denomina financiación a fondo perdido porque, salvo condicionantes, no existe la obligación de devolver la cuantía percibida.
Financiación a devolver: habitualmente vinculada a un crédito bancario, un préstamo participativo, una línea de crédito, etc.
Financiación de capital riesgo: es lo que comúnmente entendemos por inversores, personas individuales o sociedades con personalidad jurídica que invierten una suma de dinero en un proyecto emprendedor asumiendo el riesgo que conlleva la inversión a cambio de participaciones o acciones en la compañía y esperando plusvalías a futuro que le permitan recuperar la inversión y obtener beneficios sobre la misma.
Lo segundo que debemos de tener en cuenta es precisamente que, hoy en día, ya no es necesario hacer grandes desembolsos desde las fases iniciales, si no que las necesidades financieras deberían ir acorde a la fase en la que se encuentra el proyecto, siendo por lo tanto progresivas.
Surge de este modo lo que podríamos entender como un ciclo de necesidades financieras, que avanza paralelamente al ciclo de crecimiento de la empresa y donde es muy importante saber manejar los tiempos y las cantidades para acertar con lo que tu proyecto necesita en cada momento.
En primer lugar, debemos de ser capaces de estimar las necesidades presentes y futuras de tu Startup, al menos al 3 o 5 años. Estas necesidades financieras deberán estar justificadas en un plan financiero realizado con el mayor criterio posible y respaldadas por un completo plan de negocio que, además de ser tu carta de presentación ante posibles inversores, demuestre la viabilidad técnica y económica de tu proyecto.
Es evidente que resulta mucho más complejo de lo que imaginamos predecir el futuro, por ese motivo, tus previsiones financieras deben de ser coherentes, no exactas ni garantizadas, si no guardar una relación directa y muy bien definida con el modelo de negocio, la propuesta de valor, la forma con la que tu proyecto generará beneficios y la cantidad de dinero que necesitas para hacerlo crecer.
Ciclo de financiación de una Startup
Tras haber definido nuestro modelo de negocio y contar con una previsión financiera sólida, la siguiente fase es valorar el modelo de financiación que mejor se adapte a tu proyecto emprendedor dependiendo de la naturaleza de tu producto o servicio y de la capacidad de crecimiento o escalabilidad que tenga tu Startup.
A continuación, voy a hablarte de las diferentes fases de financiación de un proyecto y de cuáles son las fuentes más habituales en cada una de ellas:
Pre-seed capital
Esta es la fase en la que se encuentra un proyecto durante sus primeros pasos, cuando el emprendedor está en la fase de definir el modelo de negocio con todo lo que ello conlleva. En esta fase las necesidades económicas no son muy altas, habitualmente necesitamos el dinero suficiente para poder dedicarle tiempo a nuestro proyecto y empezar a ponerlo en marcha, lo que quizás implique a veces renunciar a un trabajo por cuenta ajena o costes asociados a poner los primeros cimientos de nuestro proyecto.
En esta fase existen numerosas vías de financiación, pero quizás las más importantes son las siguientes:
Bootstrapping
Es un término que hace referencia a iniciar un proyecto emprendedor con recursos muy escasos, únicamente con aquellos medios de los que dispone el propio emprendedor. Este término se hizo muy famoso gracias a grandes empresas como Apple o HP que empezaron en el garaje de una casa y con muy pocos recursos económicos procedentes de ahorros. Hoy en día, además de los ahorros ya existentes, también se considera bootstrapping el hecho de que un emprendedor realice trabajos como freelance para terceros con la finalidad de ir financiando su propio proyecto. La ventaja que ofrece es que permite dar los primeros pasos sin necesidad de financiación externa y crecer de forma orgánica, es decir, con la propia velocidad que seas capaz de imprimirle a tu Startup y en la medida en la que seas capaz de empezar a vender tu producto o servicio.
Además de HP o Apple, un ejemplo claro es el de GitHub, una compañía también ubicada en San Francisco, que empezó en 2007 con los ahorros de sus fundadores y la hicieron crecer únicamente con los propios recursos que generaban con sus ventas, así durante 4 años, hasta que levantaron su primera ronda de financiación por valor de 100 millones de dólares.
FFF (Friends, Family and Fools)
Lo que se conoce en la jerga del emprendimiento como “las 3 F”. Se trata de tres términos en ingles que significan amigos, familia e insensatos, o lo que es lo mismo, personas que pertenecen al círculo más cercano del emprendedor y están dispuestas a aportar dinero, por lo general en pequeñas cantidades, para que el emprendedor lleve a cabo el proyecto asumiendo todos los riesgos asociados a una fase tan temprana, como el alto riesgo de fracaso y por tanto de perder todo lo aportado sin percibir nada a cambio.
Incubadoras de Startups
Una incubadora de Startups es una organización que acompaña a proyectos emprendedores con potencial para salir al mercado y crecer. El capital aportado por las incubadoras suele ser muy pequeño, dado que la ventaja principal es que aportan recursos técnicos y expertos mentores que acompañan a los promotores de cada una de las Startup en el proceso de definición del modelo de negocio.
Crowfunding
Es otra de las vías de financiación que ha ido ganando peso en los últimos años; también llamado micromecenazgo, consiste en recaudar dinero para financiar tu proyecto a través de una red colaborativa y ofreciendo a cambio algún tipo de recompensa, como participaciones en la compañía o el acceso prioritario al producto una vez esté listo para comercializarse.
Existen numerosas plataformas de Crowfunding donde puedes publicar tu proyecto para buscar financiación, pero algunas de las más conocidas con Goteo.org, muy utilizada para el lanzamiento de proyectos vinculados al impacto social, Verkami, muy orientada a proyectos emprendedores relacionados con el ámbito cultural, social y creativo, o el caso de Kickstarter, Indiegogo y Ulule, dos de las más reconocidas a nivel mundial con millones de proyectos financiados y con diferentes categorías para publicar tu proyecto.
Seed capital
Esta fase es la conocida como capital semilla, es decir, el emprendedor ya ha sentado las bases de su proyecto y busca lanzarlo al mercado y empezar el proceso de validación con usuarios reales para poder traccionar su modelo de negocio y empezar a generar los primeros ingresos con los primeros clientes dispuestos a pagar por el producto o servicio.
También en esta fase existen diferentes vías de financiación para tu Startup, pero las más habituales en una ronda de financiación en fase Seed son:
Aceleradoras de Startups
A diferencia de las incubadoras de Startup, las aceleradoras entran en juego cuando el proyecto está un poco más maduro, buscando minimizar el riesgo de fracaso y sacar el producto o servicio al mercado buscando alcanzar el punto de equilibrio entre ingresos y gastos en el menor tiempo posible. El objetivo de las aceleradoras es apoyar a la Startup no solo con inversión económica, si no aportando también recursos que ayuden a crecer de forma rápida y acelerada para alcanzar volúmenes de facturación elevados. Estos recursos son tan dispares como imprescindibles en una fase como esta, ya que el simple hecho de aportar un espacio de trabajo gratuito donde seguir desarrollando el proyecto, una amplia cartera de contactos o la mentorización de un experto, pueden suponer un valor diferencial para el éxito de la Startup.
Business Angels
Se trata de inversores que habitualmente son o han sido emprendedores de éxito y que cuentan con un patrimonio destinado a realizar inversiones en nuevos proyectos emprendedores. Ya sea a título personal o a través de sociedades, este tipo de inversores realizan una ampliación de capital en la Startup para dotarla de los recursos financieros necesarios para seguir desarrollando el producto o servicio y llevarlo al mercado con un plan de comercialización bien definido. Habitualmente acompañan al emprendedor con valiosos consejos derivados de su amplia experiencia y como facilitadores de crecimiento poniendo a disposición del emprendedor su red de contactos profesionales, pero no suelen intervenir en la administración del día a día de la empresa. El % de participación que tomarán en la empresa a cambio del capital aportado dependerá en gran medida de la valoración que se haga de la Startup y de la cantidad de dinero invertido en función de esa valoración.
Por ejemplo: si la valoración de tu Startup es de 1 millón de € y un business angel invierte 100.000€, se quedará con un 10% de las participaciones de la Startup.
Equity Crowfunding
A diferencia del micromecenazgo o crowfunding tradicional, en el Equity Crowfunding participan inversores con un perfil más profesional, con un procedimiento mucho más definido que habitualmente se realiza a través de plataformas como The Crowd Angel, ahora llamada Dozen que se encargan de seleccionar los proyectos con mayor proyección y donde puedes comprar tickets de participación a partir de 3000€.
Startups exitosas como Glovo, Skitude o Stayforlong forman parte del portfolio de esta plataforma y han conseguido levantar importantes inversiones gracias a la fórmula del Equity crowfunding.
Fondos de capital riesgo
Las sociedades de capital riesgo (SCR) o fondos de capital riesgo suelen invertir en una fase más avanzada de las Startup, aunque algunos están especializados en entrar a formar parte de las compañías en una fase Seed. Siguiendo el mismo método que un Business Angel, analizan el potencial de crecimiento de la Startup e invierten una cantidad de dinero determinada en base a una valoración de la Startup a cambio de un porcentaje de participación en la misma. Realizan la inversión habitualmente apostando por una tecnología disruptiva, un mercado novedoso o la capacidad del equipo emprendedor entre otras cosas, asumiendo un elevado grado de riesgo al tratarse de Startups sin un histórico de facturación, flujos de caja o volumen de negocio.
Préstamo participativo
Es una fórmula muy recurrida en los últimos años y que ha ido en aumento hasta convertirse en una importante vía de financiación para proyectos emprendedores. Se trata de en un instrumento financiero que se encuentra a medio camino entre el capital social y el préstamo a largo plazo, es decir, son préstamos con unas características especiales, como un tipo de interés fijo y uno variable que habitualmente se vincula al resultado de la actividad de la empresa, un periodo de carencia elevado en el que no se amortiza capital y solamente se pagan intereses o un vencimiento a largo plazo que facilita la capacidad de la Startup de financiar su crecimiento con la facilidad de amortizar el préstamo de una forma mucho más cómoda que si de un préstamo tradicional se tratase.
La entidad que emite el préstamo puede entrar a formar parte de las participaciones con una participación minoritaria en el capital social de la empresa de forma temporal, o reservarse este derecho durante un tiempo determinado. Por ejemplo: una Startup tiene una valoración de 1M de euros, solicita un préstamo participativo por valor de 100.000€ para financiar su crecimiento con un año de carencia y vencimiento a 5 años con pagos semestrales, es decir, a partir del año 2 pagará 12.500€ de principal cada 6 meses más una cantidad determinada de intereses. Durante ese periodo de 5 años, la entidad prestamista puede reservarse el derecho a convertir el importe del préstamo en participaciones, es decir, con una valoración de 1M de euros y un préstamo de 100.000€, podría adquirir un 10% de participación en la empresa eximiendo a esta del pago del préstamo.
En Galicia, existe una entidad participada de forma pública por la Xunta de Galicia y el Instituto Gallego de Promoción Económica (IGAPE) que a su vez actúa como gestora de diversas entidades de Capital Riesgo y que ofrece la fórmula de préstamo participativo, se trata de Xesgalicia y en su web podrás encontrar información muy valiosa sobre las distintas posibilidades de financiación que ofrecen.
Early Stage
Cuando una Startup ha llegado a esta fase es porque ya ha conseguido validar su modelo de negocio y tratan de escalarlo, ya sea con la finalidad de intentar liderar el mercado al que se dirigen, internacionalizar su producto o servicio, abrir nuevos mercados, etc.
Habitualmente las rondas de financiación en esta fase se clasifican en lo que denominamos series:
Serie A: una ronda de financiación entre 1 y 5 millones de euros
Serie B: una ronda de financiación entre 6 y 20 millones de euros
Este tipo de rondas suelen estar lideradas por vehículos de inversión con una elevada capacidad financiera y que cuentan en su cartera de inversiones con Startups ya consolidadas que les permiten seguir apostando por nuevos proyectos emprendedores.
Venture Capital
Un Venture Capital es un fondo de capital riesgo que suele participar más en rondas de financiación Serie A, a cambio de una participación minoritaria en la empresa, apostando por un proyecto con capacidad de crecimiento y buscando obtener un retorno de la inversión multiplicado varias veces. Invierten en proyectos con un gran potencial, pero asumiendo un riesgo muy elevado, dado el alto índice de fracaso de las Startup; no en vano, cuentan en su porfolio con muchas inversiones en Startup de diferentes sectores para intentar diversificar el riesgo, en la mayor parte de los casos, proyectos de base tecnológica.
Private Equity
Hablar de Private Equity es hablar de fondos de inversión especializados en participar compañías con un gran potencial de crecimiento y que habitualmente están conformados por un grupo de empresarios con amplia experiencia en diferentes sectores. A diferencia del Venture Capital, el Private Equity no se centra de forma tan exclusiva en empresas de base tecnológica si no que apuesta también por empresas industriales y de otros sectores con grandes rendimientos económicos. Además, otra diferencia notable frente al VC es que el PE suele buscar un porcentaje que le otorgue control sobre la compañía, no una participación minoritaria.
Crowlending
Es una tendencia en alza que del mismo modo que el Crowfunding se base en la economía colaborativa, de modo que diferentes particulares, empresas e incluso fondos de inversión financian un proyecto a cambio de recuperar en el futuro su inversión con intereses. En la actualidad existen numerosas plataformas de Crowlending en sectores como la el de la vivienda y la edificación, es el caso de Civislend, un portal de Crowlending inmobiliario que permite a promotores obtener una financiación alternativa para sus proyectos, devolviendo el principal y los intereses una vez que las viviendas hayan sido vendidas.
Growth Stage
Es la etapa de mayor crecimiento de una Startup, donde entraríamos en lo que podemos denominar la Serie C, una ronda de financiación entre 20 y 250 millones de euros y posteriores rondas, lo que implica que la Startup ha alcanzado ya la madurez y se prepara para competir de un modo más agresivo en el mercado, para crecer en nuevas vías de negocio o incluso para ser vendida.
En este caso, uno de los vehículos de financiación más activos es el Private Equity, mencionado ya en la fase anterior, así como grandes SCR (Sociedades de Capital Riesgo) , pero en esta fase es muy habitual ver como hacen su aparición determinadas vías de financiación que no habíamos mencionado hasta el momento:
Bancos de inversión
Un segmento del sector bancario compuesto por grandes entidades, que cuentan con el músculo financiero suficiente para participar en la intermediación de recursos económicos destinados a la venta, fusión o adquisición de empresas. Estas entidades están especializadas también en la emisión de bonos de deuda para su colocación en el mercado, ¿Qué significa esto? Pues te lo explico brevemente: cuando una empresa coloca un bono deuda en el mercado, lo que realmente hace es comprometerse a devolver el dinero prestado por el comprador del bono, además de unos intereses determinados que se fijan en el momento de la emisión, lo que se conoce como cupón.
Media for Equity
Es un mecanismo de inversión mediante el cual un medio de comunicación adquiere una participación accionarial en una Startup a cambio de publicidad. Es una de las fórmulas que grandes grupos audiovisuales como Mediaset o Atresmedia emplean a menudo, ofreciendo a las Startup campañas publicitarias en sus diferentes canales y soportes a cambio de un porcentaje de participación en la compañía.
Piensa que un grupo como Atresmedia tiene cerca de 10 canales de televisión principales, como Antena 3, La Sexta o Neox, emisoras de radio como Onda Cero o Europa FM y un sinfín de medios locales, lo que supone una oportunidad muy importante para la Startup en una fase de crecimiento como esta de ganar visibilidad, algo que Startups como Wallapop o Glovo supieron utilizar para impulsar su crecimiento y convertirse en Startups con unas valoraciones millonarias. ¿Ahora entiendes por qué ves tantos anuncios en la tele sobre aplicaciones móviles y plataformas tecnológicas?
Principales grupos audiovisuales de España con inversiones en Media for Equity
Revenue Share
Otra de las formas de financiar el crecimiento en una fase growth es el modelo Revenue Share. Consiste básicamente en un reparto de los beneficios con las plataformas que han contribuido a las ventas, ¿suena raro verdad? La verdad es que si nos centramos solo en la definición cuesta un poco entenderlo, pero seguro que con un ejemplo lo verás mejor. Imagina que tienes una Startup de ropa online y firmas un acuerdo con un grupo audiovisual como alguno de los que hemos mencionado anteriormente en el que se refleja que, si ellos os anuncian en sus canales de televisión, vosotros le entregaréis un porcentaje de las compras que se produzcan en vuestra web o app en un periodo de tiempo de dos horas después de cada anuncio.
Resulta que, en el intermedio de El Hormiguero ponen un anuncio de tu página web o tu aplicación móvil, se trata de un programa con millones de espectadores y miles de ellos entran en tu web tras ver el anuncio. Pues bien, durante las dos siguientes horas a la emisión del anuncio, por cada venta que se produzca en tu página web o app tu pagarás a Atresmedia una comisión, ¿esto quiere decir que todo el mundo que ha entrado en tu web venga derivado del anuncio que han visto en el intermedio del Hormiguero? pues posiblemente no, pero la gran mayoría si y eso ayuda no solo a las ventas si no a que tu Startup gane visibilidad y notoriedad, por eso es un mecanismo muy interesante. ¿A que ahora se entiende mejor?
Exit Stage
Se trata del último escalón en las fases de vida de una Startup. Una vez que ha madurado, obtenido un crecimiento exponencial y afianzado tanto su modelo de negocio principal como otros secundarios que permitan seguir mejorando su escalabilidad, una Startup se presenta ante tres escenarios principales: seguir creciendo con recursos propios, salir a un mercado regulado como la bolsa o bien pasar a formar parte de una compañía mayor a través de una fusión o de una adquisición.
Una de las grandes operaciones de los últimos años fue la de Ticketbis, una plataforma española dedicada a la venta de entradas que fue vendida a eBay por 165 millones de dólares; en una entrevista realizada en octubre de 2017, poco después de realizarse la venta, sus fundadores afirmaban que cuando firmaron el contrato apenas les quedaba liquidez para mantener la empresa durante dos semanas.
Otra de las operaciones más sonadas del mundo Startup de los últimos tiempos ha sido la compra de Slack (una de las plataformas de comunicación y chat más utilizadas a nivel mundial) por parte de Salesforce, una multinacional especializada en software en la nube y soluciones CRM, por valor superior a los 27.000 millones de dólares.
En España, existe un mercado desconocido por muchos, es el BME Growth, anteriormente conocido como el Mercado Alternativo Bursátil (MAB). Se trata de un mercado de valores regulado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y que gestiona Bolsas y Mercados Españoles, la misma entidad en la que se integran las bolsas de Madrid o Barcelona.
El BME Growth es un mercado muy orientado a Pymes en expansión, de modo que pueden conseguir nuevos accionistas que impulsen su capacidad de crecimiento a través de ampliaciones de capital. A diferencia del mercado continuo de la Bolsa, que cotiza durante toda la sesión con el mercado abierto de 9:00 a 17:30, el BME solo abre la cotización de las empresas en dos ocasiones, a las 12:00 y las 16:00, de forma que solo marcan variaciones dos veces en cada sesión bursátil. Se trata por lo tanto de una especie de segunda división o segunda B incluso en el que empresas con mucho potencial compiten por captar financiación y llegar a ser una de las empresas cotizadas en el mercado continuo.
Como habrás podido observar, el ciclo de crecimiento y financiación de una Startup es largo y requiere de una capacidad estratégica importante para llevarlo a cabo, por lo que es importante interiorizar que hay un riesgo real de que las cosas no salgan como lo habíamos planteado y eso no será sinónimo de fracaso, si no que deberíamos obtener una valiosa lección de todo lo aprendido por el camino y, sobre todo, ser capaces de disfrutar del proceso.
Próximamente, te contaré todo lo que debes saber sobre las diferentes vías de financiación pública existentes a través de subvenciones nacionales, europeas y autonómicas, así como alternativas de gran interés de organismos como ENISA, CDTI o el Instituto de Crédito Oficial (ICO) pensadas para proyectos emprendedores en sus diferentes fases.
